En una notable historia sobre la supervivencia y la vida útil, Henry, el cocodrilo más antiguo conocido del mundo, ilustra la resiliencia y la vitalidad a la edad de 124 años. Actualmente viviendo en el Centro de Conservación Crocworld en Sudáfrica, este enorme reptil no solo tiene una larga vida, sino que también ha jugado un importante papel en la cría, en el que tiene más de 10,000 descendientes durante su impresionante viaje.
La historia de vida de Henry comenzó alrededor de 1900 en el Delta del Okavango de Botswana. Atrapado en 1903 por un receptor de elefante llamado Sir Henry, su nombre lleva un pedazo de historia. Después de haber vivido en la naturaleza durante unas décadas, fue trasladado a Crocworld en 1985, donde se convirtió en una parte integral de los esfuerzos de conservación de la instalación. El apareamiento de Henry con al menos seis mujeres ha contribuido considerablemente a la población de cocodrilos en cautiverio.
Físicamente, Henry presta atención. Mide más de 5 metros (16 pies 5 pulgadas) desde el hocico hasta la cola y pesa alrededor de 700 kilogramos (1,543 libras). A modo de comparación, el cocodrilo promedio del Nilo generalmente alcanza aproximadamente 4.5 metros (14.7 pies) y pesa alrededor de 410 kilogramos (900 libras). Las notables dimensiones de Henry no solo enfatizan su edad extraordinaria, sino que también lo distinguieron en términos de estado físico.
La ciencia detrás de la vida útil de la crocodil es fascinante. Se sabe que muchas especies, incluido Henry, viven en cautiverio durante más de un siglo. Los investigadores atribuyen esta vida a un fenómeno que se llama ‘senescencia insignificante’, lo que indica que estos reptiles pueden escapar del proceso de envejecimiento típico que experimentan otros animales. En lugar de morir a la vejez, es más probable que sean víctimas de causas externas como accidentes o enfermedades.
Es intrigante que algunos estudios sugieran que el microbioma intestinal puede desempeñar un papel crucial en la salud y la vida de estos viejos reptiles. Los microorganismos encontrados en los sistemas digestivos de los cocodrilos podrían contribuir a su resistencia y una larga vida útil, lo que proporciona más investigación sobre esta teoría.
En Crocworld, Henry disfruta de la compañía de Colgate, otro cocodrilo mayor aproximadamente 90 años. Juntos prosperan en un entorno protegido dedicado a su conservación. La historia de Henry se ha convertido en un faro de inspiración tanto para los visitantes como para los conservacionistas, con la sostenibilidad y la adaptabilidad de los cocodrilos.
Aunque la fecha exacta del nacimiento de Henry sigue siendo un misterio debido a su origen salvaje, su cumpleaños se celebra anualmente el 16 de diciembre, y su cumpleaños 125 se acerca a finales de este año. Mientras continúa llevando una vida animada, Henry es una prueba de las características notables de los cocodrilos, los esfuerzos inspiradores para proteger y comprender a estos viejos seres.