En una importante escalada de las tensiones globales, los funcionarios rusos han pedido claridad tras la reciente directiva del presidente Donald Trump de reanudar las pruebas nucleares en Estados Unidos. El Ministerio de Asuntos Exteriores ruso expresó su preocupación por lo que describió como «señales contradictorias» provenientes de Washington con respecto a las pruebas de armas nucleares, advirtiendo que la reanudación de tales actividades podría provocar acciones recíprocas por parte de Moscú y otras potencias nucleares.
En una conferencia de prensa, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, María Zakharova, destacó las posibles consecuencias de la decisión estadounidense, diciendo que crearía una “dinámica negativa” y provocaría reacciones de otros países, incluida Rusia. Zakharova señaló: «Por ahora, observamos que las señales provenientes de Washington, que están causando preocupaciones legítimas en todos los rincones del mundo, siguen siendo contradictorias… es necesario aclarar la verdadera situación».
El 30 de octubre, Trump ordenó al Departamento de Guerra que comenzara las pruebas nucleares «inmediatamente», citando la necesidad de seguir el ritmo de las pruebas de armas de otros países, especialmente Rusia y China. En una publicación en la plataforma de redes sociales Truth Social, destacó el importante arsenal nuclear de Estados Unidos en comparación con otros países, al tiempo que expresó su aversión a tales pruebas debido a su potencial destructivo. Sostuvo que las acciones de otros países requerían este cambio en la política estadounidense.
«Odio probar armas nucleares debido a su enorme poder destructivo», dijo Trump. «Pero debido a los programas de prueba de otros países, he ordenado al Departamento de Guerra que comience a probar nuestras armas nucleares sobre una base equivalente. Ese proceso comenzará de inmediato». También identificó a Pakistán como uno de los países que participan en pruebas nucleares activas, junto con Rusia, China y Corea del Norte.
En respuesta al panorama cambiante de las armas nucleares y los ensayos nucleares, los funcionarios chinos también expresaron su preocupación. El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Guo Jiakun, instó a Estados Unidos a tomar medidas concretas para cumplir con las obligaciones existentes en virtud del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares y contribuir activamente a los esfuerzos mundiales de desarme nuclear. Pidió medidas para mantener el equilibrio estratégico y la estabilidad en todo el mundo, reforzando la necesidad de un enfoque unificado para la no proliferación.
Mientras la comunidad internacional lidia con las implicaciones de la reanudación de los ensayos nucleares, las declaraciones de Rusia y China reflejan preocupaciones crecientes sobre la escalada de la competencia en armas nucleares y la fragilidad de los acuerdos de desarme existentes. La situación subraya la importancia del diálogo y el compromiso diplomático para limitar los riesgos asociados con la proliferación nuclear.



