Marcus Smith hizo un notable regreso al campo como lateral de Inglaterra durante su impresionante victoria por 38-18 sobre Fiji. Sin embargo, mientras Inglaterra se prepara para enfrentar a Nueva Zelanda, el papel de Smith pasa al banquillo, y Freddie Steward recupera el puesto titular tras recuperarse de una lesión en un dedo. Inglaterra no ha logrado una victoria sobre los All Blacks desde 2019, lo que aumenta la presión de cara al próximo partido en Twickenham.
La actuación de Smith contra Fiji marcó un regreso a la forma, aunque su posición en la alineación titular de Steve Borthwick ha disminuido durante el año pasado. El jugador de 26 años ha enfrentado desafíos en su club, Harlequins, pero su contribución fue crucial al anotar seis intentos en el partido reciente.
Fuera del campo, Smith ha expresado un deseo latente de representar a su país natal, Filipinas. A pesar de hacer su debut en el Test de Inglaterra en 2021, sus raíces se remontan a Filipinas y Singapur, donde pasó sus años de formación. Su madre es filipina y Smith está involucrado en el rugby filipino a través de vínculos familiares, ya que su hermano juega actualmente para la selección nacional. En una interacción reciente, Smith dijo: «En este momento mi corazón y mi mente están completamente con Inglaterra… pero si surge la oportunidad… sería fantástico jugar junto a mis hermanos menores».
La vida personal de Smith es igual de convincente, especialmente su relación con la modelo Beth Dolling, quien ha sido una firme defensora desde que comenzaron a salir en 2019. Dolling, una joven de 25 años que firmó con M Model Management y Body London, tiene más de 40.000 seguidores en Instagram, donde comparte destellos de sus vidas juntos y, a menudo, asiste a los partidos de Smith.
Económicamente, la carrera de Smith ha sido lucrativa. Con una fortuna estimada en £1,5 millones, sus ingresos provienen no sólo del rugby, sino también del patrocinio de marcas como Nike y Lucozade Sport. En 2024, firmó un nuevo contrato con Harlequins que promete mantenerlo en el club hasta 2028, por un valor de £ 600 000 por año, complementado por un contrato central de £ 160 000 con la RFU. Smith expresó su lealtad a Harlequins y destacó su entusiasmo por el futuro y el talento dentro del equipo.
Mientras Inglaterra se prepara para su partido crucial contra Nueva Zelanda, la presencia de Smith, ya sea titular o saliendo del banco, será sin duda un punto de interés tanto para los aficionados como para los analistas.



