En un próximo partido, los Phoenix Suns buscarán extender su racha ganadora a cuatro juegos cuando se enfrenten a los Houston Rockets. El juego está programado para el lunes a las 9:30 p. m. EST y promete ser un enfrentamiento competitivo ya que ambos equipos buscan solidificar su posición en la Conferencia Oeste.
Actualmente, los Suns tienen un récord de 11-6, lo que los coloca sextos en la Conferencia Oeste y mantienen una sólida marca de 10-5 en la conferencia. Sin embargo, tuvieron problemas en juegos cerrados y tuvieron un récord de 1-2 en juegos de una posesión esta temporada. Por otro lado, los Rockets tienen marca de 10-4 y cuartos en la conferencia, con un récord de 3-3 contra enemigos occidentales.
Una fortaleza notable de los Rockets es su dominio en los tableros, liderando la liga con unos impresionantes 16,5 rebotes ofensivos por partido, liderados por Steven Adams, quien individualmente promedia 5,2 rebotes ofensivos. Por el contrario, los Suns cuentan con una ofensiva poderosa que promedia 118,5 puntos por partido, 6,0 puntos más de lo que los Rockets permiten en defensa.
La destreza ofensiva de ambos equipos incluye contribuciones significativas de jugadores destacados. Devin Booker lidera a los Suns con promedios de 26,9 puntos y 7,1 asistencias por partido, mientras que Dillon Brooks ha llamado la atención de los Rockets, anotando 25,0 puntos en los últimos 10 partidos. Además, Amen Thompson de Houston promedia 17,2 puntos por partido junto con 6,4 rebotes, mientras que Reed Sheppard se ha convertido en un tirador de tres puntos clave, con un promedio de 5,0 triples en los últimos partidos.
Mientras ambos equipos se preparan para el choque, sus actuaciones recientes en los últimos diez partidos ilustran su ventaja competitiva. Los Suns han compilado un récord de 8-2, promediando 118,7 puntos por partido mientras capturaban 44,5 rebotes, 26,0 asistencias, 11,4 robos y 4,0 bloqueos mientras disparaban al 47,8% desde el campo. Por el contrario, los Rockets también reflejan este éxito con un récord de 8-2, promediando la friolera de 120,9 puntos y 50,6 rebotes por partido y lanzando un 48,1% desde el campo.
Sin embargo, ambos equipos enfrentan desafíos y las lesiones afectan sus selecciones. A los Suns les faltan Ryan Dunn (muñeca), Rasheer Fleming (tobillo), Grayson Allen (cuádriceps) y Jalen Green (bíceps femoral). Los Rockets también se verán muy afectados, con Fred VanVleet fuera de la temporada debido a una lesión del ligamento anterior cruzado, mientras que Kevin Durant figura en la lista por motivos personales. Además, Dorian Finney-Smith (tobillo) y Tari Eason (oblicuo) no participarán en el partido.
Mientras los Suns y los Rockets se preparan para el enfrentamiento, el resultado podría afectar significativamente sus ambiciones en la reñida Conferencia Oeste. Ambos equipos buscarán estrategias para aprovechar sus puntos fuertes y al mismo tiempo mitigar los desafíos de sus lesiones. Los fanáticos pueden esperar un partido emocionante lleno de altas apuestas y acción de baloncesto de primer nivel.



