En una importante reorganización de la programación diurna de ITV, Lorraine Kelly ha expresado su decepción por los cortes «sísmicos» de su programa de larga duración «Lorraine». La serie, que Kelly presenta desde hace 15 años, se reducirá de una hora a sólo 30 minutos, y el número de episodios semanales se reducirá de 52 a 30.
Durante una aparición en “Desert Island Discs” de BBC Radio 4, la presentadora de 65 años compartió con franqueza sus sentimientos sobre los cambios. «Me decepcioné, por supuesto que sí», pensó Kelly. «Este es el mundo en el que vivimos ahora». Al reconocer los desafíos de la industria de la televisión, destacó sus experiencias con numerosos cambios de régimen a lo largo de su carrera, sugiriendo que si bien el cambio es inevitable, este movimiento en particular se siente especialmente impactante.
Kelly explicó sus preocupaciones, especialmente con respecto a su equipo. «Lo que más me ha molestado es el hecho de que tenemos un gran equipo y obviamente ese no será el caso el año que viene porque se perderán puestos de trabajo», señaló, destacando el costo emocional que los recortes tendrán en los involucrados en la producción. Expresó su deseo de retener a algunos miembros de su equipo y dijo: «Ojalá pueda retener a algunas de estas grandes personas; ese es mi objetivo. Es muy, muy triste. Realmente lo es».
Como parte de los cambios, el popular programa matutino ‘Good Morning Britain’ se extenderá hasta las 10 am en las semanas en que ‘Lorraine’ no esté al aire. Además, ITV está considerando una propuesta que consolidaría los equipos de producción, sugiriendo que “Lorraine”, “This Morning” y “Loose Women” podrían ser producidas por un solo equipo para agilizar las operaciones y reducir costos.
Estos avances reflejan tendencias más amplias en la industria de la televisión, donde las restricciones presupuestarias y la eficiencia operativa son cada vez más importantes. Los ajustes marcan una nueva era para la programación diurna de ITV, permitiendo tanto a los espectadores como al personal adaptarse a los cambios que se avecinan.



