Live Nation se está preparando actualmente para un proceso potencial en marzo, en medio de las acusaciones del Ministerio de Justicia (DOJ) de que la compañía se ocupa de prácticas anticompetitivas con respecto a sus actividades de boletos. La demanda del DOJ afirma que Live Nation, propietario de Ticketmaster, ha utilizado su posición dominante en la promoción de conciertos y la venta de entradas para estar bajo presión para firmar contratos exclusivos de boletos. Además, la demanda afirma que la compañía se venga de las ubicaciones que eligen colaborar con otras plataformas de boletos.
A la luz de estas acusaciones, el Departamento de Justicia ha propuesto varios remedios, incluida la separación de Ticketmaster de Live Nation. Sin embargo, durante una reciente conferencia de inversores, el presidente de Live Nation, Joe Berchtold, expresó su convicción de que las preocupaciones sobre la exclusividad podrían resolverse sin deposición. Sugirió que el problema no está dentro de las prácticas de Live Nation, sino más bien en los deseos de los lugares para ganar dinero a través de esquemas exclusivos de boletos.
«La mayoría de las cosas creemos que son la mayor preocupación por la exclusividad, la duración de la exclusividad, estas no son cosas que en última instancia son impulsores de nuestro éxito», dijo Berchtold. Hizo hincapié en que Live Nation no requería exclusividad, sino una elección tomada por los propios lugares al subastar sus derechos de boleto. Si los cambios legales prohibieron tales regulaciones exclusivas, Berchtold indicó que Live Nation se ajustaría en consecuencia.
A pesar del control legal continuo, Berchtold estimuló a las partes interesadas de que las actividades más amplias de la compañía no se ven afectadas. Señaló que la compañía de conciertos está floreciendo, y aunque un equipo pequeño está dedicado a abordar problemas relacionados con el DOJ, la compañía alienta a sus diversas divisiones a continuar compitiendo con poderoso. «Todo lo que le hemos dicho a nuestros equipos en Ticketmaster en el lado del concierto, la ubicación ha seguido corriendo. No tiene que esperar un minuto sobre eso. Simplemente vaya duro», notó.
A medida que la situación evoluciona, los ojos de la industria de la música y el entretenimiento vigilarán de cerca cómo Live Nation navega por este panorama legal y qué implicaciones puede tener para el futuro de la venta de boletos en los Estados Unidos.