Han surgido nuevos informes de observaciones de drones de la base militar más grande de Dinamarca, lo que resulta en problemas de seguridad significativos entre las compañeras de la OTAN. Las autoridades de seguridad danesas confirmaron que los incidentes tuvieron lugar por la noche, aunque no se anunciaron detalles específicos sobre la ubicación de las observaciones.
Según los informes de las fuerzas armadas danesas, se observaron drones no creados en la vecindad de las instalaciones militares. La agencia de noticias francesa AFP y la Agencia de Noticias de Ritzau Van Dinamarca informaron que estas observaciones tuvieron lugar a través de la Base Aérea Karup, que se encuentra en West -Ddenmark y sirve como una base principal para la Royal Danish Air Force.
El oficial de servicio Simon Skelsjaer dio detalles adicionales y confirmó que el incidente comenzó alrededor de las 8:15 p.m. hora local y duró unas pocas horas. Indicó que uno o dos drones fueron vistos cerca de la base aérea. Sin embargo, no proporcionó ninguna información sobre el origen de los drones y enfatizó que la policía no los había derribado y colaborado con el personal militar en una investigación en curso.
En respuesta a las observaciones, el Karup -Basis compartió brevemente su inicio y pistas con el cercano aeropuerto civil Midtjylland, que se cerró temporalmente. Afortunadamente, este cierre no desembolsó significativamente los viajes aéreos, porque no había vuelos comerciales planificados en ese momento.
La reciente actividad de drones en Dinamarca es parte de una tendencia más amplia de tensiones crecientes en la región. El gobierno danés ha clasificado una serie de observaciones de drones como ‘ataques híbridos’, lo que refleja un creciente malestar sobre la seguridad nacional. La primera ministra Mette Frederiksen caracterizó la redada de drones en el aeropuerto de Copenhague a principios de semana como «el ataque más grave contra la infraestructura crítica danesa hasta ahora».
Estos incidentes reflejan eventos similares en los países vecinos, incluidos Polonia y Rumania, así como violaciones recientes del espacio aéreo estonio de los aviones de combate rusos. Si bien los antecedentes de la invasión en curso de Rusia en Ucrania persiste, estos bancos aéreos han aumentado los temores e investigaciones entre los Estados miembros de la OTAN sobre sus capacidades defensivas y preparación.