El fin de semana pasado estallaron violentos enfrentamientos en la ciudad de Gaza, que dejaron varios muertos en medio de una ola de tensiones entre las fuerzas de seguridad de Hamás y miembros del clan Doghmush. Estos enfrentamientos se produjeron tras un reciente alto el fuego entre Israel y Hamás, que marcó una compleja y preocupante escalada del conflicto en la zona.
Los relatos de testigos describen intensos tiroteos que estallaron en el barrio de Sabra el domingo por la noche. Según los informes, unos 200 miembros de las fuerzas de seguridad de Hamás participaron en el conflicto. Los residentes locales dijeron que la situación se agravó rápidamente y se confirmaron víctimas en ambos lados. Un residente señaló que la normalidad no volvió a la zona hasta alrededor de las 21:30 horas, lo que puso de relieve el caos y el miedo que se apoderó de la comunidad durante los enfrentamientos.
Un portavoz del Ministerio del Interior liderado por Hamás en Gaza confirmó que se produjeron muertes tanto entre el clan Doghmush como entre el personal de seguridad de Hamás. El ministerio acusó al clan Doghmush de presuntos vínculos con las fuerzas israelíes y afirmó que son responsables de varios asesinatos, lo que refuerza la narrativa del conflicto. En respuesta a la violencia, los informes sugieren que alrededor de sesenta miembros de la familia Doghmush han sido arrestados.
En una enérgica refutación, el clan Doghmush ha negado cualquier cooperación con las fuerzas israelíes. Reconocieron que, si bien algunos miembros de la familia pueden haber cometido errores, alegan que las fuerzas de seguridad de Hamás están atacando a todos los miembros del clan de forma indiscriminada. El destacado miembro del clan Abu al-Hassan Doghmush expresó su preocupación en las redes sociales, lamentando que la mera asociación con la familia Doghmush haya resultado en violencia extrema, incluidos tiroteos, arrestos e incendios de casas.
Este último brote de violencia es parte de un patrón más amplio y continuo de enfrentamientos entre diferentes clanes y Hamás desde que tomó el control de la Franja de Gaza en 2007, lo que pone de relieve la inestabilidad y la naturaleza volátil de la dinámica de poder en la región.
En respuesta a los disturbios, el Ministerio del Interior de Gaza anunció una nueva iniciativa destinada a introducir un «período de amnistía general» para los miembros de bandas criminales que no hayan cometido asesinatos durante el conflicto actual. Esto indica un posible paso hacia una reducción de las tensiones y un deseo de restablecer el orden, aunque persisten las preocupaciones dada la mayor visibilidad de las fuerzas de seguridad de Hamás en las zonas urbanas y los mercados de la Franja de Gaza desde el alto el fuego.