En una declaración reciente, el técnico de Eslovaquia, Francesco Calzona, expresó su opinión sobre las complejidades y desafíos del proceso de clasificación para la Copa del Mundo. Reconoció la situación especial de Italia, tradicionalmente una superpotencia del fútbol, que actualmente participa en los play-offs del Mundial, lo que calificó de «paradoja». Calzona enfatizó que si bien su equipo, Eslovaquia, todavía tiene posibilidades de clasificarse directamente para la Copa del Mundo de 2026, enfrenta una tarea enorme y debe asegurar una victoria contra Alemania en su próximo partido fuera de casa.
Calzona caracterizó el próximo partido contra Alemania como una final y destacó la importancia del partido. «Ya hemos logrado algo extraordinario al llegar hasta aquí», afirmó. Destacó que su equipo afronta cada partido con mentalidad ganadora, dispuesto a felicitar a los rivales más fuertes cuando sea necesario. A pesar de conseguir una victoria contra Alemania en su primer encuentro, Eslovaquia enfrenta una batalla cuesta arriba debido a las reglas de diferencia de goles que favorecen a los alemanes, que tienen más opciones de clasificación.
Además, Calzona apoyó a su colega Gennaro Gattuso en sus críticas al formato de las eliminatorias mundialistas. Señaló que la falta de atención a las clasificaciones de la FIFA complica aún más el proceso de selección. Según él, el panorama de la clasificación europea es mucho más difícil en comparación con otros continentes. Cuestionó el énfasis en varias prioridades en la clasificación y sugirió que el objetivo debería ser garantizar que los equipos más fuertes participen en la Copa del Mundo.
Calzona se refirió a la impresionante racha que lleva Italia de ganar seis partidos consecutivos, lo que le ha llevado a los play-offs a pesar de las dificultades del rival. Destacó que cada victoria en Europa se gana con esfuerzo, lo que contradice la idea de que Italia enfrenta oponentes fáciles. Se solidarizó con Gattuso por el apoyo que deben recibir las selecciones nacionales y criticó la negatividad dirigida hacia los Azzurri por parte de algunos aficionados durante el reciente partido en Moldavia.
Al finalizar su intervención, Calzona afirmó que independientemente de la posibilidad de que Eslovaquia se enfrente a Italia en la final del repechaje, espera un escenario en el que ambos equipos se clasifiquen directamente para el Mundial, subrayando su compromiso de apoyar a su selección nacional. Sus sentimientos reflejan las ambiciones y preocupaciones actuales mientras Eslovaquia navega por el desafiante panorama del fútbol internacional.



