El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, anunció el domingo que China ha mostrado su voluntad de concluir un acuerdo comercial después de dos días de negociaciones en Malasia. Según Bessent, se ha establecido un “marco” propuesto para una próxima reunión entre el presidente Donald Trump y el presidente chino Xi Jinping, prevista para finales de esta semana. El objetivo de esta reunión es evitar la introducción de tipos significativamente más altos.
En una entrevista con NBC News, Bessent transmitió optimismo de que ambos países pueden evitar la imposición de aranceles del 100 por ciento a los productos chinos que Trump amenazó con imponer el 1 de noviembre. Esta posible escalada surgió de los recientes cambios regulatorios en China que requieren que las entidades extranjeras obtengan permisos para exportar productos que contienen minerales de tierras raras, que China controla principalmente.
Bessent escribió que la dura postura de Trump sobre los aranceles proporcionó el poder de negociación necesario para facilitar las discusiones. Expresó su confianza en que las bases sentadas durante las negociaciones conducirían a debates fructíferos sobre diversos temas, incluida la actual crisis del fentanilo y el aumento de las compras agrícolas de Estados Unidos por parte de China.
El Representante de Comercio Internacional de China, Li Chenggang, se hizo eco de los sentimientos de Bessent y anunció que se había alcanzado un consenso tentativo sobre múltiples cuestiones, que se extendían más allá de los aranceles comerciales. Las discusiones incluyeron temas como la cooperación en el control del fentanilo y las regulaciones de exportación, que han sido puntos críticos de discordia.
En las negociaciones participaron Bessent y el representante comercial de Estados Unidos, Jamieson Greer, así como el viceprimer ministro chino, He Lifeng, lo que destaca la naturaleza de alto nivel de estas conversaciones. Las reuniones tuvieron lugar en el contexto de la firma del presidente Trump de acuerdos comerciales con Camboya, Tailandia y Malasia durante la conferencia de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) en Kuala Lumpur.
De cara al futuro, Bessent sugirió que es probable que Trump y Xi se reúnan nuevamente en China antes del Año Nuevo Lunar, que cae el 17 de febrero. También hay planes para otra reunión cuando Xi visite Estados Unidos en otoño para la cumbre del Grupo de los 20. Trump confirmó que las futuras reuniones se llevarán a cabo en Washington o en su finca de Mar-a-Lago.
La semana pasada, Trump enfatizó sus esperanzas de lograr un acuerdo integral con Xi que abordara no solo el comercio sino también las cuestiones críticas de reducir los envíos de fentanilo desde China y aumentar las compras de productos agrícolas estadounidenses, especialmente soja, para beneficiar a los agricultores estadounidenses.



