En un conmovedor homenaje a su madre fallecida, la princesa Diana, el príncipe Harry se puso una chaqueta anti -avión y cruzó un campo de mina de país activo en Angola para llamar la atención sobre el importante trabajo de la organización de Halo Trust. Esta iniciativa se centra en la limpieza de explosivos que se quedan después de los conflictos del pasado, lo que enfatiza los peligros constantes que forman para las comunidades.
Durante su visita, Harry caminó por un campo minado cerca del pueblo de Cuito Cuanavale y regresó a un lugar que tiene un significado histórico profundo. La princesa Diana visitó a Angola famosa en enero de 1997, donde su participación con Halo Trust ayudó a galvanizar el apoyo global para un tratado de la prohibición de Landmijn. Este tratado fue ratificado más tarde ese mismo año, influenciado en gran medida por su defensa y las poderosas imágenes de ella caminando por el terreno traicionero.
Esta no fue la primera vez que Harry tiró de los pasos de su madre; Viajó a Angola a principios de 2019 para una campaña de concientización similar. La guerra civil que Angola destruyó de 1975 a 2002 dejó un número considerable de minas terrestres que continúan formando amenazas fatales para los ciudadanos. Según Halo Trust, más de 60,000 personas han sido asesinadas o heridas por minas terrestres desde 2008.
Desde el comienzo de su trabajo en Angola en 1994, Halo Trust ha establecido y destruido con éxito más de 120,000 minas terrestres y 100,000 otros dispositivos explosivos. Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, no se abordan alrededor de 1,000 campos de minas, lo que enfatiza la constante necesidad de apoyo y acción internacional para limpiar estos restos mortales de guerra.