El influenciador de fitness Steven Kelly recientemente alimentó la conversación en las redes sociales después de compartir una serie de mensajes en Instagram que lo presentan en ropa militar, entrando en actividades como escalar una pared de cuerda y tratar con armas de fuego. Con una audiencia de 1,3 millones de seguidores, el puesto de Kelly estaba en colaboración con el Ejército de los EE. UU., Con una nueva iniciativa de reclutamiento dirigida a posibles guardianes de Gen-Z que pueden no haber tenido exposición previa a la vida militar. «Esta experiencia me mostró cómo el Ejército desarrolla la preparación, la resistencia y la disciplina», señaló Kelly, e invitó a su audiencia a aprender más a través de un enlace en su biografía.
Este enfoque es parte de una estrategia más amplia del Ejército para utilizar la influencia en las influenciantes de las redes sociales para aprovechar una nueva audiencia. Además de Kelly, varios influenciadores de estilo de vida, incluidos un chef y entusiastas de los deportes extremos, contribuyen a esta campaña. Madison Bonzo, portavoz del Ejército de los Estados Unidos, enfatizó que estas asociaciones mejoran la visibilidad del ejército y expresan creativamente las oportunidades disponibles a través del servicio militar.
Sin embargo, la campaña no está exenta de controversia. Mientras llegaron las reacciones, muchos comentaristas Kelly’s Post describieron como ‘propaganda’. Los críticos expresaron su preocupación por la explotación potencial, lo que sugiere que los servicios militares promueven a los jóvenes menos privilegiados y al mismo tiempo ignoraron la dura realidad de los servicios. Robert Kozinets, profesor de marketing, señaló que dicho contenido promocional es parte de una tendencia a largo plazo en publicidad, comparando la aprobación de las celebridades, independientemente de la experiencia personal del portavoz.
A pesar del escepticismo continuo, las influencias militares han estado presentes en el sector digital durante algún tiempo. Algunos fabricantes de Tiktok exploran con humor las inconsistencias de las imágenes de los videojuegos de la vida militar, donde se revelan las verdades que contradicen la cultura popular. El próximo mes, una conferencia de influencia militar en Atlanta profundizará en la complejidad de compartir experiencias militares en las redes sociales y las historias dobles de servicio activo y vida personal.
La estrategia de reclutamiento más reciente del Ejército enfatiza los desafíos de involucrar a una audiencia durante una era caracterizada por limitaciones relacionadas con la pandemia. Katherine Kuzminski, directora de estudios en el Centro para una nueva seguridad estadounidense, señaló que muchos adultos jóvenes han tenido una exposición limitada a los caminos de reclutamiento tradicionales como ROTC, lo que dificulta que el ejército haga conexiones.
Sin embargo, hubo signos recientes de recuperación en los números de reclutamiento, con informes que indican que el Ejército ha logrado sus objetivos de servicio antes del horario, en contraste con los déficits en años anteriores. Los comentaristas sugieren que este impulso de reclutamiento es de vital importancia en tiempos de inestabilidad, porque los jóvenes buscan un trabajo seguro. Jess Rauchberg, una investigadora de impacto cultural, subrayó que los mensajes del ejército resuenan con muchos que buscan estabilidad en su carrera. Al trabajar junto con los influenciadores de las redes sociales, el Ejército no solo quiere mostrar un estilo de vida, sino también una promesa de seguridad y pertenencia a reclutas potenciales.