En una notable ausencia en la ceremonia de toma de posesión en Dublín, el Partido Unionista Democrático (DUP) decidió no enviar un representante, lo que llevó al líder del partido, Gavin Robinson, a aclarar que esta decisión no pretende ser una «censura». Robinson dijo que el DUP agradecería la oportunidad de reunirse con la recién elegida presidenta Connolly durante su futura visita a Irlanda del Norte a título oficial.
En este contexto, el MLA del Partido Unionista del Ulster, Steve Aiken, fue el único representante sindicalista en el evento. Asistió en lugar del líder del partido Mike Nesbitt, quien estaba comprometido por otros motivos. Aiken señaló que no consideraba perjudicial su presencia solitaria y enfatizó que entendía las razones detrás de la ausencia de algunos miembros del partido, en particular la viceprimera ministra Emma Little-Pengelly. Señaló la importancia de la fecha, el Día del Armisticio, que requirió su presencia en Belfast, especialmente durante la conmemoración con el Rey en el Castillo de Windsor.
Aiken insistió a BBC News NI en que su presencia era para mostrar respeto por el nuevo presidente, afirmando: «Estoy aquí; soy un sindicalista y tenemos una parte sustancial de los votos». Rechazó toda idea de censura política insinuada por la ausencia de otros líderes y reafirmó el respeto debido a Connolly en esta ocasión ceremonial. Si bien Aiken expresó su comprensión por la ausencia del Viceprimer Ministro, sí expresó sorpresa por la decisión de la Primera Ministra Michelle O’Neill de asistir a la inauguración, lo que generó dudas sobre la dinámica política entre los partidos unionistas en este evento crucial.



