Rusia fortalece las maniobras militares a través de los límites de la OTAN al desplegar tanques, batallas y bombarderos supersónicos en ejercicios a gran escala junto con rusia blanca. Estos ejercicios, llamados ‘Zapad-2025’, marcan la primera operación conjunta de los dos aliados desde el inicio de la invasión de Ucrania. En particular, se lanzó un cohete hipersónico en el Mar de Barents durante los ejercicios del domingo.
La periodista rusa blanca independiente Hanna Liubakova enfatizó los objetivos estratégicos detrás de estos ejercicios. Señaló que se esfuerzan por intimidar y demostrar capacidades militares y, al mismo tiempo, evaluar las posibles reacciones de los países occidentales. La reacción a estos ejercicios ciertamente ha sido genial.
En preparación para estas actividades militares, Polonia ha cerrado su frontera con rusia blanca y había movilizado a más de 30,000 tropas como parte de sus propios ejercicios defensivos. Lituania también ha participado, lo que mejora su defensa a lo largo de sus límites con Rusia y Wit -Russia. A pesar de estos preparativos, tanto Wit -Russia como Rusia afirman que los ejercicios son de naturaleza estrictamente defensiva y no representan una amenaza para otros países.
El Kremlin ha rechazado la preocupación de los países europeos como un ejemplo de «sobrecarga emocional». Sin embargo, la historia sugiere una nube inminente de incertidumbre; La ronda final de ejercicios similares en 2019 resultó en una importante acumulación de tropas rusas en Wit -Russia, que luego se usaron meses después para la invasión de Ucrania.
Este espectáculo militar en vigor es exacerbado por las recientes redadas de drones rusos en el espacio aéreo de la OTAN, observado por primera vez en Polonia y luego en Rumania. Esto ha aumentado las alarmas en Occidente, porque muchos consideran las maniobras verticales y las maniobras militares como desafíos para la defensa de la OTAN y una evaluación de la determinación occidental.
En contraste con el sentimiento público en el ingenio de la capital rusa, Minsk, las amenazas observadas parecen estar bajas. Un residente, Mikhail, declaró: «No hay agresión … así que creo que es bueno». Otro, Kristina, se hizo eco de este sentimiento y afirmó que Rusia y Wit -Russia no son los agresores y expresan su confianza en su liderazgo.
Independientemente de las perspectivas locales, estos ejercicios ofrecen a la OTAN la oportunidad de observar cuidadosamente las capacidades militares de Rusia, especialmente a la luz de los conflictos continuos en Ucrania. Sin embargo, la proximidad de estos ejercicios al territorio de la OTAN aumenta las tensiones y preocupaciones inequívocas entre los Estados miembros.