Los demócratas de Texas que recientemente huyeron del estado para socavar un controvertido esfuerzo de redistribución, rechazar las amenazas del gobernador Greg Abbott. Después de la partida, Abbott advirtió que podría tomar medidas legales para sacarlos de su oficina si no regresan el lunes por la tarde.
La representante estatal Elizabeth Campos expresó su insatisfacción en las redes sociales y calificó las declaraciones del gobernador como «ridícula y absolutamente inaceptable». Ella articuló que las consecuencias legales amenazantes contra los legisladores por sus esfuerzos para proteger lo que piensan que los principios democráticos es una forma de intimidación en lugar de liderazgo. Campos enfatizó que pedir una representación honesta no es evasión, sino un estándar valiente a la luz de un proceso injusto.
Los legisladores demócratas dejaron a Texas para Illinois con la intención de bloquear un voto legislativo sobre la redistribución de cartas respaldadas por el ex presidente Donald Trump en preparación para las próximas elecciones intermedias de 2026. La votación fue planificada para el lunes, pero depende de la presencia de la mayoría de representantes; Si los demócratas conservan su ausencia, la medida no puede mejorar.
En sus comentarios, Abbott se refirió a un asesoramiento legal no vinculante emitido por el fiscal general Ken Paxton en Texas en 2021, lo que sugiere que los tribunales podrían dictaminar que los legisladores que evitan deliberadamente sus funciones. El gobernador indicó además que los demócratas podrían arriesgar los cargos del delito por los esfuerzos de recaudación de fondos destinados a cubrir multas que podrían aumentar como resultado de su ausencia.
En respuesta al ultimátum de Abbott, el Caucus Democrático de Texas House publicó una breve explicación de cuatro palabras: «Ven y tómalo». Esta oración significa su desafío y determinación de continuar su lucha por lo que caracterizan como una representación justa y justa en el legislador estatal.
A medida que se desarrolla esta situación, el panorama político en Texas continúa cargando de tensión, lo que refleja disputas nacionales más amplias sobre los derechos de voto y la dinámica de poder legislativo. Se esperan actualizaciones sobre este conflicto creciente en los próximos días.