Las Fuerzas Armadas de Singapur (SAF) lograron un hito tecnológico notable durante su reciente ‘Ejercicio Wallaby’ al orquestar la operación coordinada de enjambre de drones más grande de su historia. Participaron más de 100 drones autónomos, que en conjunto registraron un impresionante total de 560 horas de vuelo. Este desarrollo subraya el compromiso de las SAF de modernizar sus capacidades militares a través de tecnología avanzada.
Durante este ambicioso ejercicio, se desplegaron más de 200 drones en diferentes fases, demostrando tanto la versatilidad como las capacidades operativas de los sistemas no tripulados. Aproximadamente la mitad de estos drones realizaron vuelos coordinados, con un enfoque principal en generar mapas tridimensionales detallados del terreno mientras transmitían datos situacionales críticos sobre el campo de batalla operativo. Este logro resalta la creciente importancia de la tecnología de drones para aumentar la conciencia situacional de las operaciones militares.
Una característica clave de este ejercicio fue su perfecta integración con la red de comando digital existente en Singapur. Estos drones no solo sirvieron como herramientas de vigilancia, sino que también actuaron como nodos de retransmisión 5G en el aire. En particular, esta integración innovadora amplió las capacidades de comunicación e intercambio de datos en vastas áreas, brindando a los comandantes en el sitio acceso oportuno a información vital.
La ejecución exitosa de operaciones avanzadas de enjambres de drones durante el ejercicio Wallaby señala un futuro prometedor para el combate militar, en el que la tecnología está preparada para desempeñar un papel cada vez más central tanto en la planificación como en la ejecución estratégica. A medida que los países de todo el mundo continúan explorando el potencial de los sistemas no tripulados, los resultados de este ejercicio pueden proporcionar información valiosa y servir como modelo para futuros ejercicios militares en todo el mundo.


