Los New England Patriots tuvieron una Semana 12 desafiante contra los Cincinnati Bengals, especialmente dentro de su línea ofensiva, que ha sido la piedra angular de su desempeño esta temporada. El equipo sintió el impacto de las lesiones, comenzando con la pérdida del guardia izquierdo Jared Wilson por una lesión en el tobillo en el primer cuarto. La situación empeoró cuando el tackle izquierdo Will Campbell también quedó fuera de juego en el tercer cuarto debido a un problema en la rodilla.
Campbell, la muy respetada selección de primera ronda y cuarta selección general en el Draft de la NFL de 2025, ha sido un pilar para los Patriots desde su debut. Antes de su lesión, Campbell estuvo en el campo durante la friolera de 695 jugadas ofensivas, participando en el 98,3% de las jugadas, gracias a su juego consistente protegiendo el lado ciego del mariscal de campo Drake Maye.
Después de caer en una jugada terrestre de TreVeyon Henderson, Campbell requirió atención médica en el campo y luego se lo vio alejarse lentamente por sus propios medios. Sin embargo, después de un breve examen en la tienda médica azul, lo llevaron al vestuario, lo que generó preocupación sobre la gravedad de su lesión en la rodilla.
Con Campbell fuera del juego, el veterano liniero ofensivo Vederian Lowe intervino para asumir la posición de tackle izquierdo, haciendo la transición de su rol como suplente. Mientras tanto, Ben Brown pasó a la posición de guardia izquierdo para llenar el vacío dejado por la partida de Wilson. Los ajustes en la línea resaltan la profundidad de los Patriots, pero perder jugadores clave en posiciones críticas plantea desafíos importantes a medida que el equipo navega por el resto de la temporada.
El cuerpo técnico seguirá de cerca la condición de Campbell en los próximos días, y su estado será fundamental mientras los Patriots se preparan para juegos futuros.



