Sacramento, California, en un revés significativo para el ambicioso ferrocarril de alta velocidad de California, la administración Trump ha retirado oficialmente el financiamiento federal, que ha influido en el tan esperado servicio de trenes de bala que conectaría a San Francisco y Los Ángeles. El departamento de transporte estadounidense anunció el retiro de $ 4 mil millones a los fondos federales, una cantidad que representa aproximadamente el 25% del financiamiento total asignado al proyecto.
Después de semanas de especulación, esta decisión surge de las intenciones de la administración con respecto al proyecto ferroviario, descrito por el presidente Donald Trump y el secretario de transporte Sean Duffy como un «tren a ninguna parte». Trump fue a la plataforma de redes sociales Truth Social para expresar su insatisfacción, para etiquetar la iniciativa como una duración excesiva y enredada en regulaciones sin resultados tangibles.
El proyecto de alta velocidad de California, por primera vez verdes por los votantes en 2008, se consideró operativo en esta década. Sin embargo, el aumento de las estimaciones de costos y los retrasos repetidos retrocedieron la línea de tiempo. Actualmente, los funcionarios estatales se están concentrando en un segmento de 119 millas que conecta Bakersfield y Merced, que desean completar para 2033. El estado ha anunciado recientemente planes para emitir un informe este verano con una estrategia de financiamiento y cronograma actualizados.
En una carta a la administración, los funcionarios de la Autoridad Ferroviaria de Alta Velocidad de California criticaron el retiro del financiamiento y afirmaron que la decisión se tomó sin una evaluación extensa del proyecto. Hicieron hincapié en que ya se habían realizado un progreso considerable, con 50 estructuras construidas, incluidos pasos subterráneos, viaductos y puentes diseñados para la seguridad.
Ian Chouddri, el CEO de la Autoridad, condenó la decisión no solo injusto sino ilegal, y enfatizó que los acuerdos hechos eran vinculantes y que la autoridad había cumplido constantemente con sus obligaciones durante las evaluaciones federales, incluida una tan recientemente como febrero de 2025.
A medida que las acciones de la administración Trump continúan creando desafíos para el proyecto, comenzará la seguridad del financiamiento adicional. Con un costo total estimado de más de $ 100 mil millones, la Autoridad Ferroviaria de Alta Velocidad de California ahora analiza a los inversores privados. Se ha determinado la respuesta de los funcionarios estatales, incluido el gobernador demócrata Gavin Newsom. Newsom declaró que el estado consideraría todas las opciones disponibles para disputar y criticar a Trump porque, según los informes, pone en peligro el futuro de California y su economía.
La crítica del proyecto no se limita al nivel federal; Algunos demócratas en California han expresado su desaprobación sobre cómo se usaron los fondos. Assembly-Rebecca Bauer-Kahan mencionó un sentimiento creciente entre los votantes de que los espacios ferroviarios de alta velocidad han sido problemáticos.
En un intento por mantener el financiamiento, Newsom propuso expandir el programa de límite y comercio del estado de inicio dirigido a reducir la emisión de gases de efecto invernadero en la fecha de vencimiento de 2030, posiblemente hasta 2045. Este programa genera ingresos a través de la venta de cuerpos de contaminación, con una parte del área de carrera caliente.
A pesar del retiro de financiamiento, los funcionarios del gobierno están trabajando diligentemente para explorar todas las formas de continuación del proyecto, lo que indica que California está comprometido a promover su iniciativa ferroviaria de alta velocidad.