Foto del vecindario: ¿Por qué los animales tropicales estrechamente relacionados viven juntos?


Un importante estudio de cooperación en el que están involucrados investigadores de la Universidad de Macquarie, UNSW y la Universidad de Nebraska, ha lanzado a la ligera especies vidas de murciélagos y aves en América Central y del Sur. Publicado en el Actas de la Royal Society B: ciencias biológicasLa investigación analiza una muestra diversa con 190 especies de murciélagos y 1.197 especies de aves en 95 ubicaciones, que se extienden desde México hasta Argentina.

Utilizando técnicas avanzadas de modelado por computadora, el estudio se sumergió en tres factores principales que influyen en la coexistencia de estas especies: sus relaciones evolutivas, hábitos dietéticos y los efectos de las actividades humanas. El maestro de la asociación John Alroy, paleobiólogo de la Universidad de Macquarie, enfatizó que las especies estrechamente relacionadas tienen una posibilidad considerablemente más de vivir en los mismos entornos en comparación con las especies más distantes relacionadas. El estudio sugiere que la historia evolutiva compartida puede conducir a necesidades ecológicas comparables, para que estas especies puedan existir en diferentes hábitats.

Investigaciones anteriores estaban dirigidas a pares de especies individuales, que a menudo oscurecen las tendencias más grandes. El nuevo enfoque metodológico desarrollado por el equipo ofreció un concepto holístico de distribuciones de especies. El autor principal, el Dr. Anikó Tóth de UNSW, señaló que los hallazgos desafían la convicción convencional de que las competiciones se están separando. En cambio, la investigación sugiere que los animales con necesidades similares, especialmente aquellas que están estrechamente relacionadas, tienden a unirse en hábitats compatibles.

Curiosamente, el estudio también reveló diferentes patrones a especies que comparten preferencias nutricionales. Aunque algunas especies tendían a evitar entre sí debido a la competencia por fuentes de alimentos similares, otras lograron existir uno al lado del otro. Especialmente para los murciélagos, las personas con dietas moderadamente comparables parecían compartir espacios en lugar de aquellos con dietas muy similares o económicas. El Dr. Tóth especuló que las necesidades algo diferentes podrían promover la coexistencia al reducir la competencia directa, lo que es posible los beneficios mutuos en los hábitats compartidos.

La investigación marca un progreso importante en la comprensión de los patrones de biodiversidad en regiones extensas. El profesor asociado senior Andrew Allen enfatizó los nuevos modelos estadísticos desarrollados en este estudio, que facilitan la exploración de varios factores que influyen en la convivencia. Señaló que este enfoque innovador podría extenderse a otras áreas, incluida la genómica y las ciencias sociales.

Las implicaciones de esta investigación son considerables porque ofrecen información sobre cómo son las comunidades animales y sus posibles reacciones a los cambios en el medio ambiente. Los hallazgos sugieren una relación complicada entre la historia evolutiva y los patrones de distribución de especies sobre paisajes. Este extenso estudio es uno de los análisis más grandes que se llevan a cabo en la región neo-a-end del biodiverso, basado en una gran cantidad de datos de estudios anteriores de bates y aves.



Fuente

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí