El mercado mundial de portátiles está presenciando un resurgimiento, impulsado en gran medida por los avances en los procesadores de inteligencia artificial (IA). Con estos nuevos chips de IA, tareas como la producción de vídeos y música se pueden realizar en línea sin la necesidad de descargar software pesado, lo que aumenta significativamente la comodidad del usuario. Después de un período turbulento, el mercado se está estabilizando y es claramente visible un renovado interés de los consumidores por los portátiles.
Después de una fuerte caída en los envíos entre 2022 y 2023 (una corrección inevitable después del auge inducido por la pandemia), se espera que las ventas de computadoras portátiles experimenten un crecimiento modesto en 2024. Según datos de Canalys, se espera que los envíos totales de PC, de los cuales las computadoras portátiles representan alrededor del 85 por ciento, aumenten a alrededor de 255 millones de unidades, lo que marca una recuperación de casi el 4 por ciento. Este crecimiento revierte una caída de ocho trimestres y está impulsado principalmente por las tendencias actuales en el trabajo híbrido y la necesidad de renovar los dispositivos adquiridos durante la pandemia. Grandes actores como Lenovo, HP y Dell dominan juntos más del 60 por ciento de la cuota de mercado.
Un avance notable en esta recuperación es el aumento de las computadoras portátiles con tecnología de inteligencia artificial, también conocidas como “PC con inteligencia artificial”. Las principales empresas de tecnología (Intel, AMD, Qualcomm y Apple) han integrado unidades de procesamiento neuronal (NPU) especiales en sus últimos modelos, mejorando las capacidades informáticas del dispositivo. Dispositivos como Lenovo Yoga Pro 9i, HP Spectre x360 AI y Apple MacBook Air M4 son ejemplos de esta tendencia, que permiten mejorar el vídeo en tiempo real y filtrar el ruido sin depender en gran medida de los recursos de la nube. Los pronósticos de Gartner indican que las PC con IA representarán aproximadamente el 31 por ciento de los envíos mundiales de PC para 2025, y esa cifra podría superar el 50 por ciento para 2026, lo que destaca aún más la posición de liderazgo de las computadoras portátiles en este cambio tecnológico.
Sin embargo, la reactivación va acompañada de precios más altos. Los precios de venta promedio (ASP) de las computadoras portátiles han aumentado significativamente, de aproximadamente $720 en 2021 a aproximadamente $820 en 2024. Este aumento se atribuye en parte al aumento de los costos de producción debido a las limitaciones de la cadena de suministro, las tensiones geopolíticas y la escasez de componentes críticos como semiconductores y elementos de tierras raras. Las actuales guerras de chips, exacerbadas por las restricciones a las exportaciones de Estados Unidos contra China, complican aún más el panorama de la oferta. Además, la demanda de baterías de litio de alta calidad, que son fundamentales para estos dispositivos, está poniendo a prueba la oferta disponible de minerales esenciales como el litio y el cobalto, lo que hace subir los precios.
Los factores geopolíticos influyen cada vez más en las estrategias de fijación de precios de portátiles. Las disputas arancelarias de Estados Unidos con China han llevado a fabricantes como Apple, HP y Dell a reevaluar sus estrategias de producción y trasladar parte de su producción a países como Vietnam e India. Esta diversificación, combinada con los valores fluctuantes de las monedas y el aumento de los costos laborales en los centros de fabricación asiáticos, ha hecho que los precios minoristas de las computadoras portátiles sean aún más ajustados. Como resultado, los consumidores de bajos ingresos a menudo optan por retrasar las actualizaciones o renovar los modelos más antiguos, mientras que las computadoras portátiles continúan ganando terreno en el mercado, lo que generará un crecimiento de más del 9 por ciento en el mercado de computadoras portátiles usadas para 2024.
De cara al futuro, se espera que la demanda de portátiles se mantenga estable, respaldada por la transición continua a Windows 11, ahora que Microsoft ha finalizado el soporte para Windows 10. Este cambio obliga a las empresas a comprar nuevos dispositivos. A pesar de los actuales desafíos geopolíticos, la industria se muestra cautelosamente optimista sobre las ventas de portátiles. La nueva relevancia de las computadoras portátiles en nuestro panorama informático cada vez más inteligente señala un momento crucial en el consumo de tecnología, incluso cuando la asequibilidad sigue siendo una preocupación para muchos consumidores.



