Una tripulación de la Reserva de la Fuerza Aérea de EE. UU. conocida como «Cazadores de Huracanes» realizó un atrevido vuelo hacia el ojo del huracán Melissa, una tormenta de categoría 5 que rápidamente ganó fama como la «tormenta del siglo». Este importante fenómeno meteorológico ya está empezando a afectar al Caribe, y los informes indican que al menos tres vidas se han perdido en Jamaica cuando el huracán toca tierra.
La misión de los cazadores de huracanes era fundamental: recopilar datos vitales para el Centro Nacional de Huracanes (NHC). Las imágenes del vuelo han circulado ampliamente en las redes sociales y muestran la inquietante calma del ojo de la tormenta, en marcado contraste con las imponentes y turbulentas nubes que lo rodean.
El huracán Melissa, clasificado como la tormenta más fuerte del mundo en 2025, tiene vientos máximos sostenidos de 180 mph (295 km/h). La pared del ojo, donde los vientos de la tormenta son más fuertes, ya está azotando Jamaica, provocando fuertes vientos y grandes olas a lo largo de la costa. Después de acercarse a Jamaica, se espera que la tormenta continúe hacia el este de Cuba y las Bahamas.
En su última advertencia, el NHC hizo un llamamiento urgente al pueblo de Jamaica para que tomara medidas inmediatas para protegerse, calificando la situación de “catastrófica” debido a los feroces vientos del huracán. Se ha advertido a los residentes que esta es su “última oportunidad” para garantizar su seguridad mientras la tormenta muestra signos de intensificarse.
Los pronósticos predicen que las fuertes lluvias podrían alcanzar hasta 75 centímetros (unas 30 pulgadas) en el centro de Jamaica durante los próximos dos días. Esta tormenta es la segunda más fuerte en términos de velocidad del viento en la historia del Océano Atlántico, justo detrás del huracán Allen de 1980, que alcanzó una velocidad de 186 millas por hora.
En su aviso, el NHC subrayó la gravedad de la amenaza e instó a los ciudadanos a buscar refugio de inmediato. Las recomendaciones incluyeron encontrar una habitación interior sin ventanas para mayor seguridad y usar colchones o incluso cascos para mayor protección contra escombros y objetos que caen. El énfasis en la seguridad personal subraya las peligrosas condiciones que se esperan mientras el huracán Melissa continúa su camino de destrucción.



