Un estudio reciente realizado por investigadores de la Universidad de Konstanz profundiza en el comportamiento glimencial de Duiven, lo que hace que la nueva luz arroje cómo estas aves interactúan y ven su entorno. Bajo el liderazgo de Fumihiro Kano y Mathilde Delacoux, la investigación quiere comprender si la dinámica del grupo influye en cómo las palomas reaccionan a la mirada de sus compañeros. Los hallazgos se publican en la revista Iscience.
De pie es un fenómeno bien documentado donde las personas miran la dirección que se ve alguien más. Esta atención compartida no solo es crucial para la interacción social, sino también para las tareas de supervivencia como la búsqueda de alimentos y evitar a los depredadores. Delacoux enfatiza que este comportamiento puede influir en el aprendizaje y la toma de decisiones, con la postura de que los animales siguen las latas de los demás porque sugiere que algo interesante está presente.
Investigaciones previas sobre este tema estaban dirigidas principalmente a interacciones entre pájaros parejas, como cuervos y gansos. Sin embargo, Delacoux y Kano querían investigar cómo el tamaño del grupo puede fortalecer o seguir una lata de palomas. Su hipótesis era que cuanto más grande sea el grupo, más fuerte sería la respuesta de aspecto colectivo, al igual que el «efecto de quórum» que Stanley Milgram identificó en el comportamiento social humano.
Para realizar sus estudios, los investigadores crearon un ambiente especializado en un granero de alta tecnología en Möggen, cerca del lago Constance. Colocaron dos grupos de palomas donde un grupo observó un objeto en movimiento en su línea facial, mientras que el segundo grupo tenía una barrera que les impidió ver el objeto. Luego, los investigadores registraron los principales movimientos de las palomas en tiempo real con la ayuda de un sistema de cámara avanzado para analizar el comportamiento de recipiente en los ojos en diferentes tamaños de grupos.
Los resultados confirmaron que las palomas siguen la mirada de sus compañeros de aves, pero con comentarios importantes. En contraste con estudios anteriores que observaron diferentes seguimientos de luz en otras aves, las palomas mostraron un efecto menos pronunciado. No mostraron un claro efecto de quórum; Por el contrario, la posibilidad de seguir a otro puede aumentar linealmente con el número de palomas en la misma dirección. Si solo una paloma pareciera en otro lugar, sería poco probable que otros lo sigan. A medida que más palomas centraron su mirada, las oportunidades que otros participarían.
Los investigadores interpretan estos resultados como indicativos de un mecanismo social en lugar de prueba de procesamiento cognitivo complejo. Aunque los hallazgos sugieren que las palomas responden contextualmente a la atención de sus colegas, Delacoux advierte contra la interpretación, con el argumento de que el comportamiento parece más reflexivo en lugar de una demostración de habilidades cognitivas avanzadas. Las palomas no mostraron ningún comportamiento, como cambiar su posición para obtener una mejor imagen del objeto oculto, lo que sugiere que no consideran conscientemente las perspectivas de los demás.
Estas ideas sobre el comportamiento de las palomas pueden aumentar la comprensión de los animales sociales y los mecanismos que regulan sus interacciones. Kano señala que la importancia de estudiar animales en contextos sociales para comprender completamente sus capacidades cognitivas y comunicativas. La investigación subraya la idea de que la dinámica social influye significativamente en cómo los animales procesan y responden a su entorno, agregando así una mayor complejidad a nuestra comprensión de la inteligencia social de las aves.