En un notable giro de los acontecimientos, un fenómeno astronómico raro puede tener lugar en 2032 cuando el asteroide podría toparse con 2024 -JR4 con la luna. Este evento podría ser un impacto único, que atrae considerable atención tanto de los científicos como de los amantes del espacio.
Originalmente descubierto en diciembre de 2024, 2024 JR4 aumentó las alarmas aumentaron debido a las estimaciones iniciales de una posible colisión con la Tierra, que en algún momento sugirió un riesgo de 1%. Después de un análisis posterior, estas preocupaciones se iluminaron en gran medida, con la posibilidad de que un impacto de la Tierra cayera a un 0.004%increíblemente bajo. Sin embargo, la posibilidad de que la luna sea golpeada por el asteroide es sustancial, con los cálculos de la NASA que indican una probabilidad de impacto del 10,3%.
Las implicaciones de esta posibilidad han sido investigadas en profundidad por varias iniciativas de investigación, incluido un notable estudio de la Universidad de West Dontario. La investigación, que se pone a disposición en ARXIV, analiza las posibles consecuencias de tal impacto y enfatiza que no solo ofrecería una impresionante pantalla visual, sino que también puede crear desafíos para la seguridad espacial, porque los escombros de la luna podrían poner en peligro los satélites que corren por la Tierra.
El asteroide 2024 JR4 se observa específicamente debido a su proceso, lo que lo acerca peligrosamente tanto a la tierra como a la luna. Aunque las primeras preocupaciones giraban principalmente en torno a un ataque terrenal, las actualizaciones indican que el trabajo del asteroide ha cambiado para que sea una amenaza más creíble para la luna. El Dr. Andrew Rivkin, científico planetario de la Universidad Johns Hopkins, explicó que los cambios en el carril del asteroide cambiaron su perfil de riesgo. Hizo hincapié en que, aunque la posibilidad de vencer a la luna era reconocida previamente, el proceso actualizado hizo que una colisión fuera más alcanzable. «Hay casi un 4 por ciento de posibilidades de que golpee la luna. Eso significa que hay más de 96 por ciento de posibilidades de que extrañe la luna», señaló Rivkin. Sin embargo, si se enfrenta, esto puede conducir a un evento extraordinario que es visible desde la tierra.
Si el asteroide 2024 JR4 llegaría a la luna en 2032, las consecuencias podrían ser monumentales, lo que puede marcar el mayor impacto en 5000 años. La investigación dirigida por el físico Paul Wiegert de la Universidad de West Dontario estima que la energía liberada sería igual a una increíble TNT de 6.5 megatones, que podría crear un cráter con un diámetro de aproximadamente 1 kilómetro (0.62 millas) de diámetro. La colisión también podría disipar alrededor de 108 kg de material lunar, que puede viajar a altas velocidades y escapar del campo de gravedad de la luna. Este evento a gran escala puede generar una lluvia de meteoritos, deleitar a los observadores en la Tierra y dar lugar a nuevos meteoritos lunares.
Sin embargo, este espectáculo viene con su propia serie de riesgos. Los escombros de un impacto en la luna tienen el potencial de representar serias amenazas para los satélites y la nave espacial que funcionan dentro de la órbita de la Tierra. El material hecho hecho de hecho podría aumentar la frecuencia de los efectos de meteoritos en estos vehículos que pueden expuestos a efectos meteoroides que son considerablemente más altos que los niveles de fondo normales. El estudio enfatizó la preocupación por los efectos a largo plazo de la eyección lunar, lo que sugiere que la nave espacial podría recibir años de mayor exposición a estos riesgos.
Mientras los científicos continúan siguiendo la situación, el asteroide 2024 JR4 permanece demasiado lejos para observaciones precisas. Sin embargo, se espera que en 2028 sea una opinión más clara si la NASA planea realizar más evaluaciones para comprender mejor su proceso. Aunque las posibilidades de impacto siguen siendo bajas, existe un esfuerzo conjunto entre los especialistas en el campo de la defensa planetaria para prepararse para la posibilidad de una colisión lunar. La ubicación específica de un posible impacto determinará su visibilidad de la Tierra; Si el evento tiene lugar en el lado de la luna frente a la tierra, los observadores pueden presenciar un destello claro, seguido de una nube de polvo que desaparece durante unos minutos. Mientras tanto, la nave espacial en un trabajo puede capturar una imagen más detallada de este evento extraordinario, con una oportunidad invaluable para las agencias espaciales internacionales.