En un desarrollo importante para la investigación espacial, los científicos han observado un poderoso pulsos de radio emitidos por el relevo 2 -satélite de la NASA, que estaba inactivo desde el lanzamiento en 1964 y detuvo el estado operativo en 1967. Detectado por el kilómetro cuadrado australiano Pathfinder (Askap), este radiobropst estalló en menos de 30 nanosecondos y fue un gafas que fue un breve outshone de la intención de obtener una baja. Los hallazgos se detallaron en detalle en una publicación reciente en la revista Astrophysical Letters, donde los investigadores investigaron las implicaciones de este evento inesperado para estudiar los desechos espaciales y las descargas electrostáticas.
El descubrimiento de Relais 2 en los focos científicos es sorprendente, especialmente dada su larga historia como un satélite de comunicación experimental. Los investigadores, incluida Clancy James de la Universidad de Curtin, estaban trabajando en una búsqueda sistemática de radiotursts rápidos (FRB) cuando descubrieron la enorme señal del satélite aparentemente destruido. La intensidad de la explosión fue tan enorme que abrumaba los detectores de Askap, que generalmente estaban configurados para observaciones cósmicas distantes.
La primera emoción entre el equipo científico aumentó cuando consideraron la posibilidad de identificar un nuevo objeto astronómico, como un pulsar, conocido por sus características giratorias altamente magnetizadas y rápidas. Sin embargo, después de realizar un análisis posterior, pospusieron esta hipótesis y determinaron que la medida de dispersión de la muñeca indicó que se creó localmente en lugar de una fuente extragaláctica.
Los radiopuls no solo fueron notables debido a su fuerza, sino también por su conciso. En menos de 30 nanosegundos, produjo al menos 300 kilojanskys flux, por lo que es millones de veces más brillante que Júpiter en la longitud de las ondas de radio. Los astrónomos sorprendieron el notable poder y la corta duración del evento, porque la detección y la medición de explosiones a corto plazo generalmente es un desafío con la mayoría de los instrumentos astronómicos.
Las opciones de encuesta rápidas, amplias y amplias de ASKAP permitieron al equipo triangular con precisión la fuente de la muñeca. Al examinar los retrasos en el tiempo sobre los 36 platos de doce metros, han indicado el origen del camino predicho de 2 en el relevo 2. Ningún otro satélite en el vecindario podría explicar el momento o la ubicación de la explosión, lo que conduce a una fuerte evidencia de que el satélite para dormir era realmente la fuente.
El carácter inesperado de esta poderosa señal condujo a investigaciones inmediatas con respecto a su origen. En vista del hecho de que Relay 2 no tiene canales activos, los investigadores de la explosión fueron el resultado de una descarga electrostática, un fenómeno en el que la electricidad se inclina entre las superficies cargadas en el satélite. Los satélites pueden interactuar con el plasma en la tierra baja, lo que conduce a la estructura de carga eléctrica y descargas potenciales que generan ondas de radio.
Otra posible explicación para el origen de la muñeca incluye la posibilidad de que un micrometeoroide se enfrente con el satélite. Tal impacto podría evaporar el metal y hacer una nube de plasma que emite un breve e intenso pulsos de radio. Dada la edad de Relay 2, habría tenido un escudo limitado contra tales efectos, lo que hace que este escenario sea plausible.
El evento evoca preocupaciones importantes sobre el tema creciente de los desechos espaciales, que incluye millones de fragmentos de satélites desmantelados y micrometeoroides. Karen Aplin de la Universidad de Bristol enfatizó la necesidad de comprender cómo los desechos espaciales y las descargas electrostáticas pueden influir en la durabilidad y la funcionalidad de los satélites activos y definidos. La detección de esta poderosa muñeca puede despejar el camino para los nuevos métodos para monitorear los desechos espaciales, un problema crítico, dado que actualmente se están seguiendo más de 29,000 objetos en una tierra baja, con millones de fragmentos más pequeños que permanecen invisibles para el radar.
A medida que la tecnología espacial continúa evolucionando, la adaptación de un entorno orbital cada vez más ocupado se convierte en la suma importancia. Los pulsos de radio inesperados de Relay 2 no solo significa un descubrimiento científico notable, sino que también subraya la necesidad de vigilancia e innovación en la gestión de los desafíos establecidos por los desechos espaciales.