El 28 de julio, un asteroide designado como 2025 OW se estableció para pasar la tierra a una distancia de aproximadamente 393,000 millas. Aunque este rendimiento puede levantar las cejas y registrar la fascinación pública, a los expertos de la NASA les gustaría asegurar que tales eventos sean rutinarios dentro de nuestro sistema solar y no representan una amenaza para nuestro planeta. Ian J. O’Neill, especialista en relaciones con los medios en el Laboratorio de Propulsión de Jet de la NASA (JPL), enfatizó este sentimiento mientras hablaba con ABC News y dijo: «Esto es muy rutinario. Si hubiera una amenaza, escucharía de nosotros. Siempre seríamos alertas en nuestro blog de defensa planetario».
La NASA y otras organizaciones espaciales revisan constantemente asteroides y objetos cercanos a la Tierra (NEO), por lo que los peligros potenciales se abordan rápidamente. En el caso de 2025 OW, la NASA ha demostrado un alto nivel de confianza en predecir con precisión su posición para el próximo siglo. Esta posibilidad es crucial al aliviar las preocupaciones sobre la seguridad de tales encuentros cercanos.
Según Davide Farnocchia, un experto en asteroides en el Centro de Estudios de Objetos Cercanos de la Tierra (CNEOS) de la NASA, estos encuentros estrechos son eventos comunes. «Los enfoques naturales siempre suceden: es solo una parte del tejido del sistema solar», notó. La NASA permite que este control constante vigile otros asteroides, porque el equipo de Farnocchia actualmente está monitoreando cinco asteroides adicionales que se espera que pasen la Tierra en la próxima semana.
A pesar del impresionante tamaño del asteroide de aproximadamente 210 pies y la notable velocidad de 46,908 millas por hora, 2025 OW actualmente no es peligro. Con el esfuerzo de seguimiento continuo de la NASA, los científicos permiten una vigilancia constante para mantener su proceso. Con este conocimiento, la posibilidad de una amenaza inesperada es considerablemente limitada, por lo que la seguridad pública sigue siendo una prioridad.
Lo que distingue a los asteroides como 2025 OW es la precisión con la que la NASA puede seguir sus caminos. O’Neill repitió: «Sabemos exactamente dónde estará. Probablemente sabremos dónde estará en los próximos 100 años». Esta capacidad de predecir los caminos de los asteroides es una posesión importante de la ciencia espacial moderna, para que los científicos puedan mantener la seguridad de la Tierra y mantener al público informado de las actividades en el espacio.
Mirando hacia el futuro, otro asteroide de considerable interés apophis, que está planeado para acercarse a la Tierra de cerca en 2029. Este asteroide masivo se llevará a solo 38,000 kilómetros del planeta, una distancia más cerca que la de muchos satélites geoestacionarios. Con el tamaño considerable de aproximadamente 1,115 pies, Apophis será visible a simple vista, con una oportunidad única para la observación pública.
A pesar de los informes en los medios de comunicación y la emoción en torno a su acercamiento, la NASA ha confirmado que Apophis no es una amenaza para la Tierra. En cambio, los científicos permitirán un objeto de casi la Tierra para observar y estudiar con proximidad sin precedentes, enriqueciendo así nuestra comprensión de los asteroides y su comportamiento en el espacio. Los SkyWatchers pueden anticipar una vista notable en 2029, porque Apophis trae su enfoque más cercano y nuevamente una fascinante capítulo en la historia actual de nuestro sistema solar.