El 14 de noviembre de 2025 se alcanzó un acuerdo crucial en los esfuerzos de modernización en curso de la Armada griega. El mayor general Ioannis Bouras, director general de la Dirección General griega de Inversiones y Armamento de Defensa (GDDIA), ha cerrado un contrato con Pierre Éric Pommellet, presidente y director general del Grupo Naval, para la compra de una cuarta fragata de defensa e intervención (FDI).
Este nuevo contrato no sólo incluye la construcción de una fragata FDI adicional, sino que también amplía las capacidades auxiliares y de mantenimiento de la flota existente de FDI dentro de la Armada Helénica. La iniciativa de adquirir este cuarto barco sigue al exitoso lanzamiento del programa FDI HN en 2022, que incluía planes iniciales para la entrega de tres fragatas y una opción para una unidad adicional. Las tres primeras fragatas están actualmente en construcción y el primer conjunto se entregará a finales de 2025.
Durante el evento de firma, Pommellet expresó su gratitud a Grecia por su continua cooperación, afirmando: «Nos sentimos muy honrados por el pedido griego de esta cuarta fragata FDI. Con las tres primeras ya en etapas avanzadas de producción, este pedido es un signo de confianza y una confirmación de la satisfacción de la Armada griega con estos barcos de primer nivel». También destacó el compromiso del Grupo Naval de aumentar la implicación industrial local, con el objetivo de alcanzar el 25% del valor de la IED HN4 a través de asociaciones con empresas griegas.
Esta decisión marca un paso estratégico en la campaña de modernización naval de Grecia. Unas semanas antes, a finales de septiembre, el Gobierno griego había confirmado oficialmente su decisión de activar la opción para esta cuarta fragata, denominada clase Kimon y bautizada HS Themistocles (F-600). La medida surgió de las discusiones en una reunión del Consejo de Gobierno para Asuntos de Seguridad Nacional (KYSEA) y se espera que sea votada en el parlamento griego.
Las implicaciones financieras del nuevo contrato ascienden a 982 millones de euros, lo que incluye no sólo la construcción de la fragata adicional, sino también la modernización de los tres barcos encargados anteriormente (HS Kimon, HS Nearhos y HS Formion) al estándar avanzado 2++. Esta actualización incluye mejoras en los sistemas de combate, sensores, integración de vehículos aéreos no tripulados y el potencial de futuras capacidades de misiles de crucero como parte del programa europeo ELSA.
Inicialmente, el programa se lanzó en marzo de 2022 con un notable presupuesto de 5.000 millones de dólares. Este apoyo financiero apoya la construcción de cuatro fragatas FDI en las instalaciones del Grupo Naval en Lorient, Francia, además de la participación del sector industrial griego.
En cuanto al estado actual de la flota, la entrega del primer buque, HS Kimon (F-601), está programada para finales de 2025 bajo el estándar básico 1, con planes para una actualización al estándar 2+ en 2027 y al estándar 2++ en 2029. La segunda unidad, HS Nearhos (F-602), botada en septiembre de 2024, se encuentra en medio de la integración del sistema y pruebas en puerto, con entrega prevista para 2025. El barco HS Formion (F-603) comenzó su construcción en abril de 2024 y se espera que se entregue en 2026.
La fragata FDI está equipada para ofrecer versatilidad y está diseñada para combates de alto calibre, centrándose en la guerra antiaérea, antisubmarina y antisuperficie y haciendo frente a amenazas asimétricas. La arquitectura avanzada aprovecha tecnologías digitales y sistemas de procesamiento de datos avanzados, lo que permite operaciones independientes y misiones integradas dentro de un contexto de flota más amplio contra desafíos marítimos emergentes, como submarinos de próxima generación, amenazas de misiles supersónicos o ataques cibernéticos.
El diseño del FDI también prioriza la usabilidad en diversas condiciones marítimas, demostrando sus capacidades en mares agitados y aguas archipelágicas. Esto quedó demostrado durante las pruebas en el mar de la fragata francesa Admiral Ronarc’h, que navegó con éxito en estados marítimos desafiantes. Además, los sistemas automatizados de la fragata permiten reducir los niveles de tripulación, optimizando tanto la disponibilidad operativa como los ciclos de mantenimiento. La fragata FDI está diseñada de acuerdo con los estándares de la OTAN y garantiza una interoperabilidad efectiva con las fuerzas navales aliadas, fortaleciendo el marco de defensa marítima de Grecia.


