El icónico cóctel Cosmopolitan está experimentando un resurgimiento en popularidad, que recuerda a su apogeo en la década de 1990, en gran medida influenciado por su papel en la querida serie de televisión. Sexo y la ciudad. La vibrante bebida rosa, una mezcla de vodka cítrico, triple sec, jugo de arándano y jugo de lima, servida en una copa de martini con un toque de naranja, cautiva una vez más a los amantes de los cócteles.
Los expertos del sector señalan que este resurgimiento está impulsado por un deseo de nostalgia. Martin Kuczmarski, ex director de operaciones de Soho House Group, destacó el atractivo de los cócteles clásicos simples en medio de una tendencia hacia una coctelería demasiado compleja. «Hay algo elegante en pedir un Cosmo con confianza», dijo, reflejando un deseo más amplio de bebidas más simples y reconocibles.
Los bares de todo Londres, desde hoteles de lujo hasta gastropubs, informan de un aumento en los pedidos de Cosmopolitan. Marcello Cauda, gerente del bar del hotel The Berkeley, notó un nuevo aprecio por el cóctel y lo comparó con los favoritos de siempre como el martini y la margarita. “Una vez que lo pruebas, es muy fácil enamorarte”, señaló Cauda, destacando su glamour inherente.
La tendencia también parece verse amplificada por plataformas de redes sociales como TikTok, donde los usuarios comparten sus variaciones caseras del cóctel. Jerome Orive, gerente del bar de Fallow, Roe y FOWL, notó un aumento en las solicitudes de la bebida, incluso cuando no está en el menú oficial. Mencionó experimentar con ingredientes gourmet, amplificando el atractivo clásico del cóctel con nuevos giros.
La historia del Cosmopolitan se remonta al año 1927 de Harry MacElhone. Moscas de bar y cócteles.donde originalmente se elaboraba whisky. Sin embargo, fue a mediados de la década de 1990 cuando Dale DeGroff lo redefinió en la versión popularizada por las celebridades y las icónicas series de televisión. Un momento que consolidó su estatus fue cuando vieron a Madonna bebiendo uno en The Rainbow Rooms en Nueva York.
Ellie Ireland, gerente del bar del grupo Public House Group, notó la evolución del cóctel desde una bebida nostálgica hasta un favorito contemporáneo. «El vodka está teniendo su momento nuevamente», dijo, atribuyendo su ascenso a un cambio en las preferencias de los consumidores hacia opciones de bebida más convenientes. Curiosamente, los clientes más jóvenes, de unos 20 años, están adoptando Cosmopolitan sin los estereotipos de género que alguna vez tuvo, y lo disfrutan simplemente por su sabor e imagen.
Las cifras de ventas destacan el resurgimiento del cóctel; En Waitrose, las Cosmopolitans enlatadas han experimentado un aumento del 12 por ciento en comparación con el año anterior. La compradora Sarah Holland atribuyó esta tendencia a un cambio cultural hacia gustos nostálgicos en tiempos de incertidumbre, sugiriendo que el Cosmopolitan ofrece «una porción accesible de lujo» y una puerta de entrada a una era más optimista.
A medida que el Cosmopolitan continúa recuperando su lugar en los corazones (y vasos) de los bebedores, representa no solo un cóctel, sino un vínculo con recuerdos compartidos y una época más sencilla.



