Ha salido a la luz un caso inquietante que involucra a una funeraria local donde el cuerpo de un hombre de 87 años, William Mitchell, permaneció desatendido durante 36 días y mostraba signos evidentes de descomposición. La situación se hizo pública cuando la familia del señor Mitchell expresó su incredulidad al descubrir que su cuerpo no había sido incinerado como esperaban.
Según declaraciones hechas a las autoridades, la funeraria, operada por los acusados Sra. Bates y Sr. Elkin, no había recibido pago por el servicio de cremación; Sin embargo, más tarde se supo que en realidad habían recibido £2.040 del plan del funeral familiar del Sr. Mitchell. Elkin afirmó que la responsabilidad de la situación recaía únicamente en la señora Bell, otra operadora de la funeraria. Sin embargo, Bell respondió que Elkin participó activamente y afirmó que había recuperado el cuerpo de Mitchell.
Durante el proceso judicial se observó que los acusados alegaron problemas, incluida una gotera en el techo de su morgue, por el retraso en el procesamiento de los restos del Sr. Mitchell. El fiscal pintó un panorama sombrío de la situación financiera de la funeraria, diciendo que había sido insolvente desde su fundación en 2019, con una estrategia comercial defectuosa que esencialmente giraba en torno a «robar a Peter para pagarle a Paul».
Además del impactante abandono que rodea el cuerpo del señor Mitchell, el señor Elkin se enfrenta a acusaciones de utilizar un certificado fraudulento en su función como director de funeraria. El juicio aún está en curso y se espera que surjan más detalles a medida que se desarrolle el caso.



