El fiscal general de Arizona ha anunciado planes para apelar un fallo reciente que puso fin a los procedimientos penales contra varios sospechosos de alto perfil, incluido el exjefe de gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows, y el exalcalde de Nueva York, Rudy Giuliani. Este fallo se refiere a sus presuntos intentos de anular los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 en Arizona.
La apelación se produce después de que un tribunal inferior ordenara que el caso se devolviera a un gran jurado para su evaluación adicional. La oficina del Fiscal General Kris Mayes presentó su solicitud ante la Corte Suprema de Arizona, con fecha límite el viernes. Sin este recurso, existía el riesgo de que el caso fuera desestimado por completo.
En su declaración, Mayes enfatizó que un gran jurado independiente había encontrado causa suficiente para presentar cargos contra los acusados, enfatizando la importancia de la rendición de cuentas y el cumplimiento del estado de derecho. “Estos acusados fueron acusados basándose en dos cosas: los hechos y la ley”, añadió, reiterando su compromiso de garantizar que se haga justicia.
El caso ha estado estancado en el tribunal de distrito durante seis meses debido a la conclusión de un juez de que los grandes jurados no recibieron información crucial sobre una ley que rige la certificación de los resultados de las elecciones presidenciales. Esta ley ha sido cuestionada por los demandados en su defensa.
Los abogados defensores argumentan que la ley proporciona un mecanismo para presentar múltiples listas de votantes al Congreso en caso de que surjan disputas sobre los resultados de las elecciones. En un acontecimiento relacionado, un activista republicano se declaró culpable de un delito menor, mientras que los cargos contra Jenna Ellis, una abogada asociada con la campaña de Trump, fueron desestimados a cambio de cooperar con los fiscales. Otros sospechosos del caso mantuvieron sus declaraciones de inocencia.
Michael Columbo, en representación del senador estatal Jake Hoffman, otro acusado en el caso, criticó el procesamiento de los cargos por parte de Mayes, alegando que tenía como objetivo castigar a los acusados por ejercer sus derechos constitucionales. Expresó su esperanza de que, dado el tiempo adicional que requerirá la apelación, ella reconsidere el caso y finalmente decida desestimarlo.
Mark Williams, abogado de Giuliani, también expresó escepticismo sobre la apelación del estado y predijo que la Corte Suprema de Arizona podría rechazar la petición. Calificó las acciones del fiscal como motivadas políticamente, dirigidas a atacar a los acusados por su apoyo a Trump.
En las elecciones de 2020, Joe Biden obtuvo una estrecha victoria en Arizona, por poco más de 10.000 votos. El panorama legal que rodea casos similares continúa evolucionando, ya que un juez recientemente desestimó un caso similar en Michigan, mientras que otras acusaciones relacionadas con programas electorales falsos aún están pendientes en estados como Nevada, Georgia y Wisconsin, ninguno de los cuales ha ido a juicio.



