Sharon Osbourne tuvo una visión creativa para su marido, Ozzy Osbourne, y deseaba que grabara un «álbum de duetos con todas las vocalistas femeninas», según reveló su hijo, Jack Osbourne. Esta revelación se produjo durante una entrevista en el podcast de Jack, ‘Trying Not To Die’, donde él y su medio hermano Louis hablaron sobre las influencias y preferencias musicales de su padre.
Jack compartió sus conocimientos sobre los gustos musicales de Ozzy y enfatizó que, si bien apreciaba la música rock, se sentía particularmente atraído por las composiciones con una producción y melodía excepcionales. Louis intervino, recordando que a su padre le encantaba la música de los 80, mencionando específicamente bandas como Tears For Fears. Según Jack, Ozzy ha pasado por una fase importante de Michael Jackson en los últimos años, que refleja sus eclécticos intereses musicales.
Los hermanos recordaron que uno de los artistas contemporáneos que más impactó a Ozzy fue Adele, cuyas habilidades vocales lo impresionaron profundamente. Louis comentó: «Estaba completamente asombrado por su rango vocal y su voz». Asimismo, Ozzy tenía un gran respeto por Amy Winehouse, a quien consideraba una de las más grandes voces surgidas de Gran Bretaña en los últimos veinte años. Jack señaló además que Ozzy tenía un afecto especial por Annie Lennox y otros cantantes, reconociendo sus habilidades melódicas.
La conversación profundizó en una colaboración histórica que combinó la voz de Ozzy con la de Madonna en una canción perdida hace mucho tiempo titulada «Shake Your Head». Esta canción, originalmente remezclada de una canción de la banda estadounidense Was (Not Was), contó con Kim Basinger en su lanzamiento inicial. La versión con Ozzy y Madonna apareció más tarde en una compilación de vinilo titulada «Now Dance 92» casi una década después y recibió una atención renovada después de ser subida a YouTube.
En última instancia, la entrevista sirvió como un sincero recordatorio de Ozzy, quien falleció el 22 de julio a la edad de 76 años, poco después de su última actuación como líder de Black Sabbath. Fue honrado en una ceremonia privada en su casa de campo en Gran Bretaña, a la que asistieron figuras notables como Elton John y miembros de Metallica, con una procesión que celebró su legado por Birmingham que atrajo a miles de fanáticos.



