Las acciones del fabricante de vehículos eléctricos Tesla experimentaron una fuerte caída del 5,5% durante la sesión de la mañana, lo que indica aún más una tendencia negativa continua para las acciones. Esta desaceleración coincidió con informes alarmantes que revelaban una caída significativa en las ventas de Tesla en China en octubre. La compañía registró un total de 26.006 vehículos vendidos en la región, una fuerte caída del 36% en comparación con el mismo mes del año pasado y una asombrosa caída del 63,6% desde septiembre. Esta importante caída ha afectado especialmente a la cuota de mercado de Tesla en China, que cayó del 8,7% a sólo el 3,2%.
El panorama competitivo en el mercado de vehículos eléctricos de China quedó subrayado por informes recientes que muestran que Xiaomi superó a Tesla en ventas en el mismo mes, vendiendo más vehículos que los totales combinados de los populares Model Y y Model 3 de Tesla.
En un contexto más amplio, el mercado bursátil estadounidense en su conjunto experimentó una tendencia a la baja a medida que los inversores se acercaban al mercado con mayor cautela, especialmente en el sector tecnológico. Después de un repunte impresionante, muchos inversores optan por recoger beneficios, un fenómeno a menudo denominado «rotación del mercado». Este cambio implica trasladar la inversión del sector tecnológico de alto nivel –que según algunos analistas está sobreinflado– a otras áreas percibidas como más estables o con precios más atractivos.
Para agravar esta cautela, el reciente fin de un prolongado cierre del gobierno ha generado preocupación. Si bien este hecho se considera generalmente positivo, también implica una afluencia de informes económicos retrasados que los inversores han estado esperando ansiosamente. Con información crucial sobre la inflación y el empleo en el horizonte, muchos participantes del mercado parecen estar vendiendo acciones de manera preventiva, anticipando que los próximos datos podrían impulsar a la Reserva Federal a ajustar su postura sobre los recortes de tasas.
Las acciones de Tesla han mostrado una alta volatilidad, experimentando 45 oscilaciones de más del 5% en el último año. La caída de hoy refleja la percepción del mercado sobre la importancia de la noticia, aunque puede que no cambie fundamentalmente las perspectivas de la empresa. Sólo unos días antes se produjo una notable caída, cuando las acciones cayeron un 3,3% tras el anuncio del fondo soberano de Noruega de oponerse al sustancial paquete de compensación de 1 billón de dólares del CEO Elon Musk, lo que pone de relieve las preocupaciones sobre la dilución de los accionistas.
La empresa enfrenta varios desafíos que van más allá de las cifras de ventas. Tesla ha iniciado dos retiradas que afectan a casi 70.000 Cybertrucks debido a problemas con luces demasiado brillantes y barras de luz sueltas. Además, la compañía enfrenta desafíos legales relacionados con un accidente fatal que involucró a un Model S, con acusaciones de que las puertas del vehículo no se abren.
A pesar de estos reveses, las acciones de Tesla siguen subiendo un 6,4% desde principios de año. Actualmente cotiza a 403,44 dólares por acción, y sigue estando un 15,9 % por debajo de su máximo de 52 semanas de 479,86 dólares registrado en diciembre de 2024. Los inversores que compraron acciones de Tesla por valor de 1.000 dólares hace cinco años descubrirían que su inversión ha aumentado hasta unos 2.963 dólares.
A la luz de las fluctuaciones de la suerte de Tesla, el mercado permanece alerta a las oportunidades potenciales, especialmente en el contexto de las tendencias cambiantes dentro de la industria tecnológica, incluido el aumento de las empresas de software empresarial que integran la IA generativa, que están preparadas para convertirse en actores importantes del mercado.



