Un incidente en una guardería de Chicago generó serias preocupaciones entre los padres y miembros de la comunidad el miércoles luego del arresto de un empleado por parte de las autoridades de inmigración durante las horas ocupadas de la mañana. Testigos informaron que la mujer, quien trabajaba como maestra en el Centro de Aprendizaje Temprano de Inmersión en Español Rayito de Sol, huyó a la instalación pero fue detenida entre puertas de vidrio cuando agentes federales marcados con uniformes de «POLICE ICE» ingresaron al local.
Los transeúntes describieron la escena caótica y dijeron que la empleada insistió en que era ciudadana estadounidense cuando fue detenida por agentes que interrogaban a otros presentes en el centro poco después de su apertura alrededor de las 7 a.m. Los relatos de testigos presenciales sugieren que la represión fue parte de una iniciativa más amplia conocida como “Operación Midway Blitz”, que supuestamente ha llevado a más de 3.000 arrestos de inmigrantes en el área de Chicago desde principios de septiembre. Esta operación en particular incluyó tácticas de control intensificadas, incluido el despliegue de oficiales fuertemente armados e incluso apoyo aéreo para las redadas.
Después del incidente, Rayito de Sol, que opera en múltiples ubicaciones en Illinois y Minnesota, cerró inmediatamente la escuela de Chicago por ese día. Las acciones de los funcionarios de inmigración rápidamente generaron críticas, especialmente de padres que sintieron que el episodio alteró el ambiente seguro para sus hijos pequeños.
Esmeralda Rosales, una madre que acudió rápidamente al centro tras enterarse de la situación, expresó su indignación. La trabajadora reclusa era la maestra de su hijo, y Rosales caracterizó al personal como «las personas más amables y agradables», enfatizando que nadie, especialmente los niños, debería tener que experimentar tal trauma. Otro padre, Chris Widen, se hizo eco de sus sentimientos y enfatizó la importancia de la seguridad emocional de los niños durante eventos tan perturbadores.
La repentina presencia de agentes federales provocó malestar entre las familias que dejaban a sus hijos. Adam González, un padre que fue testigo de los acontecimientos, se sintió obligado a documentar la escena porque creía que era fundamental que el público comprendiera la realidad de la aplicación de la ley de inmigración en su comunidad.
Posteriormente, la comunidad continúa lidiando con las implicaciones de tácticas tan agresivas y su impacto en las instituciones locales. La situación pone de relieve las tensiones en torno a la política de inmigración, especialmente en ciudades como Chicago, que han adoptado políticas santuario destinadas a limitar la cooperación con las autoridades federales de inmigración.
A medida que avanzaba el día con fuertes respuestas de padres y miembros de la comunidad, aumentaron los llamados de apoyo y solidaridad con la trabajadora detenida y sus colegas, alimentando aún más el debate sobre las prácticas de control de inmigración en los Estados Unidos. Ni ICE ni el Departamento de Seguridad Nacional proporcionaron ningún comentario inmediato sobre el incidente.



