El Ejército de los EE. UU. ha llegado a un acuerdo fundamental con AeroVironment (AV), comprometiendo 95,9 millones de dólares para producir el Freedom Eagle (FE-1), un interceptor cinético de próxima generación destinado a contrarrestar las crecientes amenazas que plantean los vehículos aéreos no tripulados (UAV). Esta iniciativa es parte del programa Interceptor Cinético de Largo Alcance, administrado por el Centro de Misiles y Aviación del Comando de Desarrollo de Capacidades de Combate del Ejército de EE. UU., en colaboración con el Consorcio de Tecnología de Misiles y Aviación.
AV ha logrado avances significativos en el desarrollo del FE-1 y ha completado con éxito varios hitos críticos, incluidos escenarios de prueba con fuego real, lanzamientos controlados de vehículos de prueba y evaluaciones exhaustivas de ojivas. Estos logros demuestran que el misil está completamente desarrollado y presenta riesgos reducidos mientras se prepara para su despliegue sobre el terreno.
Para acelerar tanto el diseño como la producción, AV ha formado asociaciones con actores clave de la industria, incluido Applied Systems Engineering, que se especializa en aviónica y soluciones de ingeniería. Daniel Noland, Director Senior de Captura Estratégica de AV, dijo: «Estamos listos para hacer la transición de esta tecnología disruptiva de la investigación y el desarrollo al campo de batalla y estamos enfocados en aumentar la producción para entregarla a escala y velocidad». Hizo hincapié en la creciente necesidad de capacidades efectivas contra los drones, reconociendo que los drones se han convertido en una de las amenazas aéreas más formidables que enfrenta Estados Unidos en la actualidad.
El Freedom Eagle (FE-1) está diseñado específicamente para interceptar y neutralizar vehículos aéreos no tripulados del Grupo 2 y 3. Estas categorías consisten en drones tácticos de tamaño mediano que normalmente se utilizan para misiones de vigilancia, selección de objetivos o ataques ligeros. El diseño del FE-1 le permite integrarse eficazmente en sistemas de defensa aérea en capas, proporcionando una capacidad cinética crítica de destrucción dura cuando las opciones no cinéticas, como las técnicas de interferencia o de energía dirigida, son insuficientes.
Su eficacia operativa se ve subrayada por el motor sólido de doble empuje del cohete, que permite una rápida aceleración inicial seguida de una fase de combustión sostenida esencial para el combate a mayor distancia. AV comercializa el FE-1 como un interceptor de alto rendimiento y bajo costo, y señala que está diseñado para capacidades de lanzamiento rápido. Además, el diseño enfatiza la fabricación escalable para satisfacer las cambiantes demandas operativas del futuro.
Este contrato y los avances en el programa Freedom Eagle representan un importante paso adelante en los esfuerzos continuos del Ejército de los EE. UU. para mejorar sus capacidades en respuesta al cada vez más complejo panorama de amenazas aéreas.