Crece la oposición pública a las estrategias de despliegue militar de Trump


El presidente Donald Trump ha intensificado las maniobras agresivas de su administración en Estados Unidos, adentrándose en un territorio controvertido que está generando grandes preocupaciones sobre el uso de la fuerza militar en el país. En los últimos días, su administración ha tratado de eludir un fallo de un juez nominado por Trump que había limitado el despliegue de la Guardia Nacional en Portland, Oregón, citando la falta de violencia significativa durante las protestas.

Trump ha criticado abiertamente a los demócratas, especialmente durante los discursos ante líderes militares y tropas, creando una división al comparar a la oposición política con los oponentes militares. Su insistencia en desplegar la Guardia Nacional en Chicago se encontró con una feroz oposición tanto del alcalde como del gobernador, y el presidente sugirió que su resistencia podría llevarlo a prisión. Además, Trump ha insinuado que invocará la Ley de Insurrección, una medida que no se ha utilizado en décadas y que le daría más autoridad para enviar fuerzas militares a situaciones internas.

A pesar de sus justificaciones, no hay pruebas sustanciales de una insurrección ni de niveles alarmantes de criminalidad en las ciudades involucradas. El citado juez señaló que las protestas en Portland no habían sido notablemente violentas, destacando un momento urgente en el que Trump parece estar actuando en contra de los marcos legales establecidos y el sentimiento público.

Las encuestas de opinión reflejan un creciente escepticismo hacia las estrategias militares de Trump, lo que indica un cambio en la opinión pública que muchos no esperaban al comienzo de estas acciones. Encuestas recientes han demostrado que los estadounidenses se oponen bastante al despliegue de la Guardia Nacional por parte de Trump en las ciudades estadounidenses; una encuesta de CBS News-YouGov muestra una desaprobación de entre el 58% y el 42%. De manera similar, una encuesta de la Universidad de Quinnipiac encontró que el 55% de los encuestados desaprobaba que Trump utilizara a la Guardia y a las fuerzas del orden federales para combatir el crimen.

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En meses anteriores, el sentimiento público había estado más dividido, y muchos estadounidenses expresaron su apoyo a una participación militar limitada en la labor policial, siempre que las autoridades locales estuvieran de acuerdo. Sin embargo, los datos más recientes indican un cambio definitivo: el público ahora rechaza por completo el papel de los militares en la aplicación de la ley a nivel nacional.

Además, el índice de aprobación general de Trump en materia de delincuencia ha bajado, ahora alrededor del 41%, frente al 43% del mes pasado. Según una encuesta del Washington Post e Ipsos, la desaprobación de su control del crimen asciende al 54%, lo que pone de relieve un importante alejamiento de su anterior postura firme en este tipo de cuestiones.

Detrás de estas cifras hay una preocupación filosófica más amplia respecto del uso de la fuerza militar. La jueza Karin Immergut enfatizó que el enfoque de la administración Trump corre el riesgo de desdibujar la distinción esencial entre autoridad civil y militar, un sentimiento que se hace eco en las encuestas públicas en las que los estadounidenses expresan preocupación por la militarización con fines políticos. Una preocupación común radica en la creencia de que el ejército debería reservarse para situaciones extraordinarias, y un notable 58% de los encuestados indicó que su uso debería limitarse a amenazas externas.

En medio de estos acontecimientos, Trump continuamente presenta los disturbios internos como equivalentes a amenazas extranjeras, una narrativa vista por muchos como una politización de la acción militar. Aunque goza de un apoyo sustancial de su base, la tendencia de la opinión pública sugiere que su rumbo actual puede contradecir la voluntad de una porción significativa de la población estadounidense, lo que plantea serias dudas sobre las implicaciones de un enfoque tan militarizado de la gobernanza.



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