Hay un notable hallazgo arqueológico en una tumba de 2.200 años en el sur de China y ofrece cuál puede ser el gráfico anatómico más antiguo del cuerpo humano. El artefacto, conocido como los manuscritos médicos de los conductores Mawang, revela información significativa sobre el conocimiento médico y las prácticas de la dinastía Han que se abarcó de 206 a. C. a 220 AD.
Los conductores de Mawang ofrecen descripciones complicadas de la anatomía humana, de modo que los primeros estudios anatómicos conocidos se marcan en la historia registrada. Central de este texto antiguo hay informes detallados de varios caminos de «meridianos» en todo el cuerpo que corresponden a grandes arterias y venas. Según Vivien Shaw, un maestro de anatomía de la Escuela de Ciencias Médicas de la Universidad de Bangor, comprender estos textos requiere un enfoque único que difiere de las perspectivas médicas occidentales contemporáneas. Los académicos no solo deben poseer la capacidad de leer el chino original, sino también el conocimiento anatómico necesario para interpretar las estructuras a las que se hace referencia dentro de los manuscritos.
Estos meridianos son simbólicos de la acupuntura, la antigua práctica tenía como objetivo regular la energía del cuerpo y promover la salud a través de la manipulación de estas rutas. Los investigadores han identificado las descripciones en los manuscritos como representaciones precisas de vasos sanguíneos significativos. Por ejemplo, una sección describe un meridiano que comienza con el dedo gordo y se extiende a lo largo de la pierna interna y el muslo, que se conecta a diferentes articulaciones, correlacionándose inmediatamente con el camino de la vena de sapheno. Otra descripción describe una ruta de la palma, cruza el antebrazo y en los bíceps, que se parece a la ruta de la arteria cubital.
Históricamente, la acupuntura a menudo fue criticada debido a la falta de validez científica. Sin embargo, este descubrimiento cree que los antiguos practicantes chinos documentaron observaciones anatómicas precisas. Aunque el origen de estos estudios anatómicos sigue siendo algo poco claro, los científicos especulan que pueden haber involucrado disecciones de delincuentes, porque la práctica de disección en los cuerpos de élite a menudo se consideraba tabú.
Las implicaciones de los conductores de Mawang están expandiendo aún más las historias convencionales sobre la historia de la anatomía humana. Durante siglos generalmente se suponía que los primeros mapas médicos fueron producidos en la antigua Grecia por figuras como Herófilus y Erassistratus. Sin embargo, los textos griegos sobrevivientes están considerablemente menos justificados en comparación con el conocimiento anatómico coherente que se articula en los manuscritos chinos, que antes de los estudios griegos datan de unos pocos siglos.
Este descubrimiento innovador aleja el enfoque de un punto de vista eurocéntrico y subraya las contribuciones esenciales de las culturas no occidentales al campo de la medicina. Si bien los investigadores elaboran los detalles complicados de los conductores de Mawang, allana el camino para una comprensión más rica de cómo la medicina tradicional china, en particular la acupuntura, puede haber basado en la observación científica en lugar de solo en las tradiciones místicas.